"The litle walk of a dog"

Viajar no es escapar, es acercarse. Y los viajes no son los lugares que visitas; son lo que somos. Al viajar, te conoces.

lunes, 27 de junio de 2011

I love "Lao Style"

A veces me pregunto porque viajo tan rapido. Supongo que son las ganas de ver cuantos mas sitios mejor. Es cierto que he estado en muchos lugares, pero en momentos como ahora me invade una extranha sensacion de dejarme muchas cosas atras... Acabo de entrar en Thailandia, y ya echo de menos Laos.
No tenia ni la mas remota idea de lo que era Laos, y en tan solo 8 dias me ha cautivado. Y eso que no cuenta con famosos reclamos turisticos (o quizas justo por esto). El autentico tesoro de Laos es su gente. Nada mas entrar en el pais, me impacto la pobreza y la falta de recursos. Ahora que me voy, creo que son mucho mas felices que sus "desarrollados" vecinos vietnamitas.
Los franceses ocuparon toda la region de Indochina durante bastante tiempo, y tienen una frase tipica para definir a sus habitantes: " Los vietnamitas plantan el arroz; los camboyanos lo ven crecer, y los laosianos lo escuchan recojer". Un buen resumen. Mientras en Vietnam puede llegar a estresar el ritmo de vida en las ciudades, aqui el famoso "Lao Style" hace que todo sea mas facil. Y eso que no lo han tenido facil precisamente. Solo decir que Lao tiene el triste record de ser el pais mas bombardeado de la historia de la humanidad. Todavia quedan cientos de miles de UXOS (armamento no explotado) diseminados por todo el pais. Me indigna especialmente la inhumana "descarga" que realizaban los bombarderos norteameicanos tras arrasar Vietnam. De vuelta a sus bases, si les sobraba alguna bomba, simplemente la soltaban donde cuadrara para ahorrar combustible y aumentar el lucrativo negocio armamentistico del Tio Sam. Mucho mejor si se las hubieran metido por el culo.

Ademas, al estar en una zona neuralgica de la region, entre chinos, vietnamitas, camboyanos, tailandeses y birmanos, a los pobres laosianos les han llovido historicamente las ostias sin saber ni de donde les venian. Quizas por esto son tan felices ahora. Mientras tenga un bol de arroz y un sitio donde descansar, el laosiano esta tranquilo. En 8 dias no he escuchado ni un solo grito, ni una discusion ni nada por el estilo. Y este feeling se contagia.
El norte de Lao es un sitio inmejorable para perderse haciendo trekking en un enorno salvaje, ver la puesta de solo desde un templo budista o simplemente relajarse con una BeerLao al mas puro estilo local. Ahora me gustaria haberme quedado un poco mas por alli... Pero Quentin, mi nuevo companhero de viaje frances, tiene su vuelo de vuelta desde Bangkok en 10 dias, y yo decidi acompanharle hasta alli para volver en avion a Hanoi. Asi que a moverse!

En Luang Prabang

Vang Vienh

Despues de recorrer un poco el inexplorado norte, llegamos a Luang Prabang. Nunca me hubiera imaginado que el Laos hay tanto turismo. Aunque se reduce a la capital y una pequenha ruta hacia el norte hasta Vang Vien, justo lo que nos queda por delante, asi que a cambiar el chip. Luang Prabang es una ciudad muy maja, con decenas de templos budistas y sitios interesantes (es capital Mundial de la UNESCO, ndlr). Pero no es para nada un sitio autentico. En el centro, TODOS los edificios son Guesthouses, hoteles, lavanderias, bares, restaurantes para todos los gustos , y en general, todo lo necesario para satisfacer el insaciable apetito de los cabelleras doradas.
Seguimos hacia Vang Vien, y aqui ya acabe de quedarme tonto del todo. Es un pequenho pueblo rodeado de un increible paisaje karstico, totalmente creado para el turismo de aventura: trekking, climbing, biking, kayaking y en general, cualquie verbo en ingles acabado en -ing. Incluso tubing, que es quizas lo mas famoso aqui. Basicamente, te dan una llanta de camion, te llevan un par de kilometros rio arriba, y venga! tira pabajo como los besugos! Nosotros nos lo montamos por nuestra cuenta, para variar. Por 2 euros, alquilamos una moto cada uno, y a recorrer los increibles paisajes de alrededor. Por cierto, ni fianza, ni ensenhar documentos ni nada, Lao Style!
Fuimos a unas cuevas que nos dijeron eran enormes, y por el camino nos desorientamos un poco. Acabamos dando botes por el cauce seco de un rio, hasta que un viejete muy salao (que no se de donde salio) nos hizo entender que lo siguieramos. Tras una buena caminata, llegamos. "Pues no son tan grandes", pense yo ingenuamente. El caso es no habia visto un pequenho agujero en un lateral. Ahi nos viene el viejete con una linterna y nos dice que por 1 euro nos la ensenha (la cueva joder!). Resulta que vivia alli, y nos conto que hace unos meses se encontro alli dentro a 2 guiris que se habian perdido, se les acabaron las pilas y se quedaron alli a esperar... BUUUUUU... no quiero ni imaginarmelo, porque una vez dentro me di cuenta de que no es ninguna tonterida. Hay zonas donde mi ya casi olvidada claustrofobia quiso aflorar, ya que hay pasos muy estrechos, incluso uno de unos 20 metros donde tienes que ir reptando con el agua por la barbilla. Acojonante como se movia el viejo por alli dentro.
Hay muchas salas, llenas de un monton de estalactitas y todas esas cosas de cuevas. Tambien agujeros sin fondo (al menos a la vista), murcielagos e insectos mu raros...pero lo que mas me acojono fue llegar a una sala y ver alli en el medio un enorme Buda!estamos locos o que!?! como la metieron alli!!??
Despues de casi una hora de espeleologia rustica-laosiana, salimos dando bastante asco. Banho en el rio, y de vuelta a Vang Vien en nuestras motoretas de cuatro tiempos y 125cc que valen para todo. Fuimos al Mekong a ver la puesta de sol, y acabamos jugando un partido de futbol contra 4 ninhos. Casi nos ganan los muy jodios! tuve que soltar algun codazo para marcar el ultimo gol...
Y ya luego por la noche, ya acabe de loquear con el sitio tan raro que es Vang Vien. Fuimos a un bar al aire libre, con casetas de paja y tal, todo muy chilaut afrolaosiano. Quentin ya habia estado alli, y el camarero se alegro un monton al verlo. Era muy majo, hablaba muy bien ingles y queria saber de todo. Cuando me dio la carta, no me lo creia. Entre cervezas y licores: "Te de marihuana", "Pastel de champinhones" o "cachimba de opio" eran algunas de las especialidades de la casa. Al poco de llegar, un israeli pidio unas magdalenas de setas. Poco despues se convirtio en uno de los pasatiempos de la noche... todo muy bizarro. Me lleve el Ipod, y al camarero le gustaron mis cnciones, y se las bajo y estuvo sonando toda la noche. Asi que si alguien pasa por el "ROCK Bar" de Vang Vien, que no se extranhe si escucha a los Gypsi kings, Piperrak o Siniestro Total. Habia una hoguera en el medio, y se me vino una iluminacion: "Que dia es hoy? 23? NO JODAS!! SAN JUAN!!". Asi que sin darme cuenta, asi fue mi san juan de este anho, en una especie de fumadero de opio, en Laos, a la orilla del Mekong escuchando Loquillo y los Trogloditas (entre otros grandes) :)

Nos levantamos un poco perjudicados, y bus a Vientiane, la gran capital. Aunque junto a Montevideo debe ser la capital del mundo mas tranquila. Al dia siguiente, ya a Thailandia. Como si nos estuviera persiguiendo alguien. Me dio mucha pena dejar Lao, y a punto estuve de quedarme recorriendo el centro del pais solo. Al final, decidi comprar el vuelo de vuelta desde Bangkok, poner un nuevo sello en mi pasaporte, y dejar de castigar mi culo con los sufridos autobuses laosianos. Asi que ahora me quedan unos 10 dias de recorrido por tierras thailandesas, para volver a Vietnam desde la gran Bangkok, y despues ya encontrarme con los hermanos Holec para comenzar la segunda parte del viaje, que nos llevara por toda la costa vietnamita hasta Camboya, visita express a Filipinas, y acabar en Taipei para poder acabar el viaje "Made in Taiwan" :)

Vientiane

Tuk-Tuk!

sábado, 18 de junio de 2011

De arrozales, licor de serpiente, el Vietminh...y mi archienemigo

Aqui estoy. En el ciber mas cutre que se pueda uno echar en cara, en un pueblo en mitad de la zona mas remota de Vietnam, en la frontera con Laos. Dien Bien Phu se llama, y es famoso porque aqui comenzo la "reconquista" contra los franceses en la epoca colonial, mas concretamente en 1954. Aqui gano el Vietminh (la guerrilla de la epoca) la primera batalla contra los franchutes, que supuso acabar echandolo del pais y la independencia de Vietnam. Debieron pasarlas putas.
Llegar hasta aqui fue toda ua odisea. Salir de Hanoi ya costo. De las 5 estaciones de bus que hay en la ciudad, solo desde una salen hacia mi primera parada, Mai Chau, y ademas esta muuy a las afueras, asi que me toco una hora de moto hasta alli, con la mochila a cuestas y los nervios a flor de piel por el conductor, que la iba liando parda. Despues, 6 horas de bus local puro vietnamita, con gallinas, sacos de mil cosas, el techo lleno de bicis, mucha gente y un calor brutal. Pero al llegar se me paso todo. Esta zona es lo que tenia en mente de Vietnam: arrozales infinitos, gente sonriendo, naturaleza exhuberante, sombreros conicos de paja... Al llegar pense que me iba a ser dificil encontrar un sitio donde dormir. Pero la zona esta desarrollando un plan piloto de ecoturismo, y a los 5mn me cruce con un senhor que chapurreaba ingles, y me dijo que me llevaba a su casa para que la viera y si queria me quedaba. Despues de un paseo en moto cruzando el valle, llegamos a su aldea, donde vivian 5 familias en las casa tipicas de la zona. Todas se construyen sobre pilares de madera a unos 3 metros de altura (para que no entre la bicheria supongo). Abajo, la sala multiusos: cocina, comedor y sala de estar. Sin paredes. Y arriba una unica habitacion done duerme toda la familia en el suelo de bambu y con el techo de paja. Es lo que buscaba. Ademas se puso a diluviar, asi que no habia duda, alli me quede.
Cene con el senhor Hao y la senhora Bin, que creo que le da al opio, porque no para de reir todo el dia. Le ayude a preparar la cena, una especie de carne de algo, muy adobada y envuelta en unas hojas, acompanhado de tofu muy especiado y arroz con salsa de pescado. A los dos les parecio muy raro que quisiera ayudarla a hacer la cena y recoger. Creo que pensaron que soy gay o algo, porque alli los hombres solo trabajan fuera de casa, y las mujeres fuera y dentro. Y los hombres tampoco trabajan mucho, un par de horas por la manhana y otro par a ultima hora. Aunque con el calor que hace es normal, a la minima estas empapado en sudor, por lo que no es como para estar dando botes precisamente. Son gente super relajada, se pasan medio dia tirados en la hamaca o donde sea.
Me cautivo la aldea de Bac La. Las 5 familias que viven alli son como una sola. No hay puertas, ni vallas ni ventanas; los perros no tienen duenho, las llaves no se quitan de la moto y los ninhos se cuidan entre todos.
Como llovia y se hizo de noche no pude ver mucho mas, asi que me quede con Hao a intentar hablar un poco, pero su ingles es tan rustico como su casa, asi que se hizo dificil. Me quedaba un paquete de jamon envasado al vacio que me metio en la mochila la buena de mi mama, y se lo di a probar. Como les gusto tanto, Hao saco una botella que tenia a buen recaudo, y me puso un minichupito. Se lo bebio el primero, y puso cara de "BUUUUUUHH". Yo le di despues, y mi cara no se como fue, pero el sabor era increiblemente fuerte y con mucho mucho alcohol. Despues me hizo entender que era licor... de serpiente!! entre el licor este y el vino de arroz, a dormir la monha pronto.
En medio de la jungla, en el suelo de bambu, sin ventanas ni puertas, y estaba mas tranquilo que nunca. No se si era el entorno, el cansancio, o los ronquidos de Hao, que eran exactamente iguales que los de mi padre, y quizas mi subconsciente los asocio a la seguridad del hogar. O a lo mejor fue el licor de serpiente, no se. El caso es que me quede sopa al momento. Poco despues me desperto un mensaje de espanha con la mejor noticia que podia imaginar. No sabes como me alegraste cadela!! :)
A las 6 en pie. Desayune y me fui con Hao a visitar a unos amigos de otra aldea. Muy curioso todo. Por la tarde le alquile su bici y me fui a perderme y deshidratarme por el valle. Los de los pueblos mas alejados flipaban viendome pasar por alli todo feliciano. El valle me recuerda mucho a las pelis de guerra de Vietnam. Varias veces me dio la sensacion de que en cualquier momento iba a salir de la jungla un peloton con Stallone al frente pegando tiros y quemando casas.
No hay agua caliente, pero creerme, no hace falta. Cene algo riquisimo, pero no tengo ni idea de lo que era ni como se llama, porque aqui todos los nombres de comidas, pueblos, calles y demas me parecen ladridos, todo igual, y me es imposible quedarme con nada. Despues de cenar me fui a dar un paseo por medio de los arrozales. Estaba la luna llena, y al no haber casi luces se veia todo perfectamente, reflejando en el suelo y creando una atmosfera surrealista y sobrecogedora. Me sente y me entro un ataque de risa. No podia creerme que estuviera alli. Son esos momentos por los que todo vale la pena.
Al dia siguiente, y muy a mi pesar, me despedi de Hao y su familia, y a seguir hacia Dien Bien. Eran 14 horas, asi que decidi parar a medio camino, en un pueblo llamado Son La. No habia demasiado que ver, pero me sirvio para descansar y coger fuerzas en el hotel. Me costo 7 euros, pero me daba la sensacion de que estaba derrochando una fortuna: cama grande, banho privado con agua caliente, aire acondicionado, tele y hasta muebles. Todo un lujazo! Otro dia, y a seguir en bus. Pero esta vez se les fue de las manos. La carretera cada vez se hace peor cuanto mas vas hacia el noroeste, y el bus cada vez va mas lleno. Cuando parece que ya no entra ni una mosca mas, el "desacomodador" se encarga de encajar todos los equipajes y a la gente, como si de un tetris se tratara, para que suba mas y mas gente. BUF! Conte 34 personas en un minibus, cada una de ellas con su variopinto equipaje. Subiamos las montanhas en primera a 15 por hora. Y en medio de una cuesta, el motor se para. Pero no pasa nada, el conductor se bajo con un cuchillo y un trapo, y a los 10 mn estabamos en marcha de nuevo. Cuando estabamos llegando, el desacomodador le dijo a todos que cerraran las ventans y las cortinas. "Pondran el aire acondicionado" pense yo. JA! ultimos 15 mn de agonia maxima, a punto estuve de bajarme y que le den pol culo. Supongo que lo hacen para que no les vea la policia, porque viajar en esas condiciones no puede ser legal ni en Vietnam. A veces pienso que soy un poco masoca. Pero despues pienso en los buenos momentos, y se me pasa. Ademas, esos ratos menos buenos tambien son positivos, y parte del viaje, porque te hacen valorar mas las pequenhas cosas que en el dia a dia damos por supuestas y que no valoramos lo suficiente. Incluso a veces me siento mal por quejarme o estar de mala ostia, ya que yo paso por aqui una sola vez en la vida, mientras que para el resto de la gente que hace el viaje conmigo toda tranquila es su rutina.
Nada mas salir de la estacion, me encontre con el que ya es mi archienemigo. Un viejete harapiento, que tiene pinta de veterano de guerra, y que se vino directo a por mi. Empezo a darme golpes en el hombro, cada vez mas fuerte, y despues del tute que llevaba encima estaba bastante sensible, asi que le solte desde lo mas profundo de mi alma un: "CAGON TU MADRE VETE A TOCARLE LOS COJONES A OTRO, CHINO CABRON!!". Se puso a gitar tambien y a agitar su baston al viento, y se fue. Los de alrededor rompiendose el pecho. Debe ser un personaje tipico del pueblo. Pues nada... Hoy, nada mas salir del hostal NGHA THAM (creo que significa "Cuchitril de Joe"), lo veo en la acera de enfrente, y otra vez la misma escena. Segui de turismo, viendo el museo de la guerra que esta bastante bien (hay una bicicleta preparada para llevar 300 kg de artilleria y rarezas asi) y la colina A1, zona cero de la reconquista. Y al salir, a que no sabeis a quien me encuentro?? a mi ya me da la risa cuando lo veo...
De todas maneras, me siento muy seguro en Vietnam. Mucho mas que en sudamerica. La gente es muy muy humilde, y bastante rara (y hasta a veces borde) desde mi punto de vista occidental. Pero sin embargo es super honesta. La gente deja sus cosas sin vigilar, y esta siempre muy tranquila. Supongo que es una mezcla de la personalidad vietnamita mezclado con las durisimas penas por robo. Hay poca policia, pero por lo que me contaron si te cojen delinquiendo no se lo piensan dos veces. Hay que recordar que es un regimen bastante estricto (me niego a llamarle comunista, porque de comunista solo tiene el nombre). Yo no tuve el mas minimo momento de inseguridad hasta ahora, y todo el mundo se ofrece a ayudarte cuando te ve perdido. Aunque no suele servir de mucho, se agradece. Toda la gente menor de 30 anhos mas o menos me saluda o me dice "Helooooooouuuu!" con una sonrisa que no se si es educacion, ironia, curiosidad o un poco de todo. El caso es que desde que sali de Hanoi no me encontre a un solo occidental, y llamo bastante la atencion alli por donde paso. A veces me sacan fotos, y hasta un policia me abrazo y me dijo: "David Vila!! David Vila!!" :)

Lima!! tu camiseta en Laos!! :)

Remontando el Mekong

Luang Pravang

Mai Chau
LLegada a Laos




El camino a Laos fue una locura. La frontera aqui se abrio este mismo anho a los extranjeros; hasta ahora solo podian cruzar laosianos o vietnamitas. Pretenden crear una nueva ruta turistica, pero de momento aun estan empezando a asfaltar la carretera, asi que aun le queda. En el autobus/chimpin iba un guiri raro, e intente hablar con el, pero solo consegui saber que era americano. Un puto borde. Al llegar a la frontera con Laos, nos vamos el americano y yo a la zona de hacer el visado, y a el se lo llevan a otra habitacion. Me quedo esperando, y a los 15 minutos me viene otro oficial vietnamita (con cara de Chuck Norris achinado medio jamaicol) y me sienta en una silla en una habitacion bastante siniestra. Me cague un poco la verdad. Me pregunto de que conocia al americano. Le dije que del autobus. Me pregunto un par de tonterias mas y al final despues de pagar 35 euros por el visado, me vuelvo al bus donde esperaban todos para irnos. Nos fuimos sin el americano. Se lo dije al autobusero, y me dijo que se quedaba alli...No se que habra sido de ese hombre.
El caso es que llegamos a Laos cruzando un camino larguisimo por medio de montanhas, atravesando aldeas en las que viven igual que hace 200 anhos, o mas.
Al llegar a Lao, me quede en la primera aldea cruzando uno de los afluentes del Mekong. Un sitio increible. Vagabundeando por el pueblo encontre un templo budista, y los monjes jovenes eran super majos. Estudiaban ingles, asi que me tuvieron un rato alli hablando con ellos, y hasta les ensenhe a bailar muinheiras. Un momento bastante subrrealista y simpatico.
Y despues me volvi al Mok Hua Guesthouse, donde me encontre a la revelacion de la semana. Constance, un frances muy majo que viaja tambien solo por la zona, y seguimos la ruta juntos, hacia Luang Pravang...

lunes, 13 de junio de 2011

Calor y motos en Hanoi


La ultima vez que escribi estaba cruzando el Mar del Plata, de Uruguay a Buenos Aires. De eso hace ya mas de 6 meses. Ahora estoy en Moscu, celebrando mi cumpleanhos con una botella de vodka y 14 horas para bebermela, hasta que salga el vuelo a Hanoi, Vietnam.

La alegria al salir, con parte de la family, y el derrame cerebral llegando 40 y pico horas despues...


Me prometi  que seguiria escribiendo aun estando en casa, aunque fuera a modo de epitafio bloguero, pero por alguna extranha y misterioso fuerza de la naturaleza, me es imposible escribir o sacar fotos por placer estando en mi pais, o en espanha.
No tiene mucho sentido que hable ahora de Buenos Aires, y se me hace muy raro estando aqui, pero yo tambien soy raro. Pues eso, que Buenos Aires es una gran ciudad mas, pero que vale mucho la pena conocer. La visite con mi grandisima amiga Mitzi, de Chile, y los dos nos dimos  cuenta de que lo interesante de BA no son los sitios turisticos, sino su espiritu. Y el espiritu es como los pedos: estan ahi, se sienten, pero no se ven. Por eso para disfrutar la estancia hay que salir a pasear sin rumbo fijo, pararse a escuchar a los musicos callejeros (que son muchos y los hay muy muy buenos) y hablar con cualquier desconocido, aunque tambien hay que saber parar e irse antes de que la internacionalmente famosa labia argentina te funda el cerebelo. Y el tango! No me suelen gustar las cosas miticas, pero aqui hago una excepcion. Me quede impresionado al ver a una pareja hacer el amor en publico. Porque para el que no lo sepa, el tango es eso. Tambien fui a ver una obra de teatro (que saben mucho de eso) y un concierto de Attaque 77, que fue una autentica salvajada punki. Es curioso, pero de lo que mas me acuerdo es de los desayunos… me pasaron mil y una mas, pero mi ya de por si reblandecido cerebro esta peor que nunca tras tantas horas de viaje…
Y ya entrando en materia, hablare sobre el viaje que empieza. Lo curioso, aunque empieza a ser habitual, es que acabe aqui de rebote. Es la tercera vez que intento ir a Cuba, y al final cambio de planes. Esta vez el culpable fue otro companhero del gran piso S19 de Bilbao, Jan Holec "checo loco", que iba a visitar a su hermano Milan que esta estudiando en Taiwan, e iban a hacer un recorrido por la zona. Me apunto! Y tanto que me apunto, que llegue un mes antes que ellos… asi que mietras no llegan, viajare solo por el norte de Vietnam y Laos.
Ya nada mas subir al avion, mi otro yo cogio las riendas. No es algo extranho, todo el mundo es en mayor o medida bipolar, tripolar, bicubico o incluso del Madrid. Solo que hay gente que lo esconde, lucha, no lo sabe o una de las partes ya gano. Mi otro yo es feliz si lo saco de paseo de vez en cuando. Asi que de momento se puede decir que soy una persona sana mentalmente, algo por cierto muy valioso y extranho hoy en dia…


Y centrandome ya en Vietnam, contar las primeras impresiones de estos dos primeros dias. Lo primero que piensas es: “ostiaputaendios!!que calor!!”, y lo segundo, de una manera mas difusa: “como pueden conducir asi estos taraos??” . Para refutar estas profundas reflexiones, un par de datos:  temperatura media de 33 grados y 80% de humedad y dos millones de motos.
No se si estoy paranoico con esto o que, pero creo que estos dos hechos son los que marcan el ritmo de la ciudad. Por un lado, el calor hace que la mayoria de los hanoianos (?) se lo tomen con mucha calma, y hagan mas vida en la calle. Las casa son muy pequenhas y sin aire acondicionado, y la mayoria de la gente (al menos eso creo) trabaja en los negocios familiares que hay en los bajos de las propias casas, o en la misma calle. Por esto, los espacios publicos son mas publicos que en otros sitios. Asi, las calles estan a rebosar de vida; hay gente sentada en pequenhos taburetes tomando cosas de colores; durmiendo en los sitios mas insospechados (vi a un ninho dormido sentado en una papelera!); jugando a algo parecido a las damas pero que aun no se que es; haciendo thai chi en los parques o jugando al badminton (esto fue parte de China durante mil anhos, ndlr);  o simplemente viendo pasar el tiempo ( de estos ultimos hay muchos).
Lo de las motos, al pincipio es pa mear y no echar gota. Hordas de motoristas suicidas invaden la ciudad con sus continuos tocar de claxon y maniobras inverosimiles, creando un notable estres mental a los sorprendidos visitantes. Pero luego, si lo intentas, te acostumbras. Ejemplo: en el avion me encontre con un malaguenho, un ceutarra (que no celtarra) y un barcelones. Bajamos juntos a la ciudad, y a los cuatro nos impacto lo mismo en el mismo orden: calor y motos. Increiblemente me encontre al dia siguiente con dos de ellos en un banco cambiando dinero, y me dijeron que en todo el tiempo que llevaban alli aun no habian cruzado ninguna calle grande, que antes pillaban un taxi. La verdad es que la primera vez hay que echarle un par de huevos. El truco esta en no correr ni hacer movimientos extranhos, solo andar lentamente sin parar. Eso si, mientras cientos de motos te pasan alrededor… y aunque van despacio, si te dan te hacen pupita fijo. La verdad es que no se como no hay mas accidentes, porque realmente es la ley de la selva, cada uno pasa cuando quiere y por donde quiere, cogen los cruces por la acera, pasan por los dos lados, van hablando con el de alado, …es un caos extranhamente organizado, porque aun no vi ninguna ostia, ni amago tampoco. Pero bueno, una vez superado el miedo, resulta el mejor medio de transporte para ir a cualquier parte de la ciudad por menos de un euro (previo regateo de rigor si eres occidental). El problema es que te entiendan. De primeras te dicen “yeyeyeye” como si fueran Concha Velasco, para que te subas, y despues ya ves que no tienen ni puta idea. El caso es que te haran bajar en cualquier otro sitio, a no ser que te pongas cabezon, les hagas entender a donde quieres ir, y no les pagues hasta estar en la puerta del sitio. Esto lo aprendi mediante el eficaz metodo de ensayo y error.
La verdad es que va a ser un continuo generador de anecdotas lo de la comunicacion… hoy intente comprar un billete para manhana poder ir a un pueblo de las montanhas, a unos 200 km, y despues de visitar 2 estaciones de bus, y una de tren, me quede igual. Pero manhana por mis cojones que llego a Mai Chau. Necesito alejarme de este bullicio y de los sitios turisticos, que estan plagados de buscavidas de todo tipo. Menos mal que los tengo calados. Lo primero que aprendi en vietnamita es “Kong” (como el apellido del gorila). Un buen Kong con cara de King puede ahorrarte muchas comidas de oreja e incluso problemas.
El 95 % de los turistas en esta zona de Vietnam van al este, a la bahia de Halong, o al norte, a un pueblo llamado Sapa. Asi que me voy al lejano oeste (porque siempre suele ser asi??), a una zona remota donde el Vietcong se escondio y comenzo a ganar la guerra contra los yankis, cerca de la frontera con Laos, donde pretendo entrar en una semana o dos, haciendo un circulo hasta volver a Hanoi, donde quede con Jan y Milan en un mes mas o menos. A ver que tal… por cierto, ya siento lo de los acentos, pero los teclados aqui son una locura. Un abrazo humedo!! (por lo del calor, cochinos!)